Nazaret, tuya es la palabra

Ciudadanía

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Nazaret, tuya es la palabra

27/03/2023

Nazaret Pareja hizo un canto a la Semana Santa en la mañana de este Domingo de Pasión a través del Pregón 2023. De aguante, de resiliencia, de nostalgia porque “Pedrera esperó”, comenzaba su pregón, pero “la historia más bonita jamás contada, y que siempre vuelve por primavera, volvió a repetirse”.
 
La presentación de la pregonera corrió a cargo de Mónica Ramos Gómez, miembro del Grupo Joven de la Hdad. Del Santísimo Cristo de la Sangre, quien advertía lo que está por llegar: “Escuchadme ahí abajo. Esta levantá va por todo el pueblo de Pedrera, vamos a hacer las cosas muy despacito, (…). Vamos a poner en las calles de nuestro pueblo lo más hermoso de este mundo, nuestra Semana Santa”.
 
Un dúo clásico de cuerda acompañó, en ciertos momentos, el acto con unas marchas que entrelazaban a la perfección con las palabras de Nazaret. En presencia de los hermanos y hermanas mayores de las hermandades y cofradías locales, Juan Pareja, Alicia María Humanes, Eugenio Parejas y Modesto Luna, además del Alcalde, Antonio Nogales, y la Concejala de Cultura, Dolores Gordillo, la pregonera de 2023 comenzó un discurso redactado con fe, cariño y respeto.
 
En ese momento, Pedrera esperaba oír el canto a la Semana Santa y fue cuando Nazaret se encabalgó en un baile de versos que sonaba a “sones cigarreros de Victoria” desde el primer al último renglón.
 
Como todos los pregones, de estilo propio, personal, pero “llenando este domingo de poesía y de prosa, pero sobre todas las cosas, de sentimiento.” Nazaret Pareja recorrió todos los rincones de su Semana Santa a través de sus versos con exaltación, sin estridencias, íntimo y comprometido con sus vivencias, las de “una mujer, cristiana, cofrade y costalera” e hija del trueno.
 
Recuerdos y vivencias propias “que son curas en el alma y dan un poco más de vida”. A Mª Stma. de la Paz Coronada de Sevilla, de la que se enamoró cuando tan solo era una niña. A sus hermandades, ligada a ellas tanto por amor como por herencia y mención especial a la familia encargada de traspasar su pasión, de generación en generación, haciendo que tenga el alma pintada “de verde Esperanza” y en el corazón una espinita encallada “de negro Doloroso”.
 
Un pregón que culminaba por todo lo alto, queriendo para el tiempo, haciendo de la Semana Santa de Pedrera una poesía que mandó a todos y a todas las presentes “¡a volar!”.